20
Mar

Hello Yellow!!

Los colores generan sensaciones y emociones sobre las personas, y en decoración no es prudente utilizar un color si no sentimos que nos estimula o si no nos gusta realmente.
Hoy os vamos a hablar del amarillo, color de difícil utilización pero atractivo por su gran carga energética.

 

[one_half]salon amarillo[/one_half][one_half_last]
Salón que te ilumina

El amarillo simboliza la luz del sol, representa la felicidad, la inteligencia y la energía.

El amarillo está asociado a la buena suerte, a la visión intuitiva y a la creatividad.

Además podemos emplearlo para acentuar la luz natural cuando es escasa. De hecho el amarillo se usa más habitualmente en países nórdicos debido a que allí disfrutan de pocas horas de sol.[/one_half_last]

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Pautas para emplearlo

Sin embargo, el amarillo en exceso puede irritar y sobreestimular, además de que puede generar un efecto perturbador e inquietante.

En las fotografías que os mostramos a la derecha os damos unas pautas para emplearlo de manera sutil, pero con acierto.[/one_half][one_half_last]local con detalles amarillos[/one_half_last]

[one_half]cojines amarillos[/one_half][one_half_last]
Contrastes

Podemos emplearlo en contraposición a un color oscuro, porque así vamos a resaltar los detalles decorativos.

Pensad que el amarillo es el primer color en el que vamos a fijar nuestra atención.[/one_half_last]

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Sólo para estancias determinadas

Es recomendable utilizar el amarillo para provocar sensaciones agradables. De hecho, es un color relacionado con el apetito porque estimula la actividad gastrointestinal, lo cual lo hace muy adecuado para las cocinas.

Pero cuidado, en el resto de vuestras viviendas no debéis emplearlo con gran profusión. Hay estudios que demuestran que los bebés lloran más en habitaciones amarillas.[/one_half][one_half_last]cocina amarilla[/one_half_last]

 
Por su eficacia en atraer la atención es muy útil para ayudarnos a destacar nuestros objetivos:

  • Haz un borde amarillo a la hoja en la que tienes tu régimen o dieta.
  • Potencia la unidad familiar con una foto enmarcada en amarillo.
  • Utilízalo para subrayar el calendario escolar de tus hijos: exámenes, trabajos, actividades de interés…
  • Un par de cojines amarillos pueden iluminar tú salón.

El amarillo es un color vivo, espontáneo, desenfadado y variable, por ello no es adecuado para sugerir seguridad y estabilidad. Sin embargo, si incluimos pequeños detalles, el amarillo va a iluminar nuestras vidas.

 

«Anota en una pizarra amarilla las metas que persigues en tu vida». -Margot Pardos